En días como hoy, cuando el viento golpea con fuerza la
lluvia contra el cristal, y el frió parece que no se ira nunca, intento pensar
en lo romántico de este largo invierno y sin querer mi cabeza se va hacia el
sur… que le voy hacer, será que tanta agua me ahoga el alma: y cierro los ojos
y se me llenan de blanco de cal y de luz, de sol y de brisa, de sonidos de
guitarra y de palmas, que será que en un día como hoy mi sueño esta en el sur.